Es parecido a lo que sentís apenas abrís los ojos sin saber para que lado está la cama.
Des-balance neuronal, una fuga de sentido sin conciencia, un mareo terrenal interno.
Es parecido a lo que sentís entre el sueño y la vigilia cuando intentás despertar y abrir los ojos; y una fuerza desconocida te lo impide con resistencia.
Un leve dolor de cabeza y una impotencia que te debilita.
Es parecido a lo que sentís cuando tu cuerpo tiembla pero no de frío, ni de miedo.
Esquizofrenia momentánea, pequeña paranoia sin contorno.
Es parecido a lo que sentís cuando llorás sin saber porque.
Desenlace depresivo sin origen detonante. Solo algo inevitable e indescriptible.
Es parecido a lo que sentís, cuando no sabés lo que sentís.
por Sol Belilos
arte: Marcos D. Eleonori

No hay comentarios.: